Organizaciones demandan para frenar la ley que exige mostrar los diez mandamientos en escuelas de Texas, incluida Houston ISD.
Una nueva ley estatal que obliga a exhibir una traducción protestante de los diez mandamientos en escuelas públicas de Texas podría entrar en vigor el 1 de septiembre, coincidiendo con el inicio del ciclo escolar en Houston ISD y otros distritos del estado. Sin embargo, un proceso legal en curso podría impedir su implementación.
El pasado viernes, un juez federal en San Antonio escuchó los argumentos de una coalición de cuatro organizaciones de libertades civiles que buscan una orden judicial para suspender la entrada en vigor de la medida, aprobada esta primavera como Senate Bill 10 (SB 10).
La demanda y sus argumentos
La demanda fue presentada en nombre de 16 familias de Texas con diversos orígenes religiosos y no religiosos. El grupo sostiene que la ley vulnera la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos, que prohíbe al gobierno establecer una religión oficial o favorecer una fe sobre otra.
Los demandantes argumentan que la decisión sobre la formación moral y religiosa de los estudiantes corresponde exclusivamente a las familias y que la exhibición obligatoria de los diez mandamientos en escuelas constituye una forma de adoctrinamiento religioso.
Contenido y alcance de la ley
El texto de SB 10 establece que todos los salones de clases en las escuelas públicas de Texas deben mostrar de forma visible los diez mandamientos, en una versión traducida desde una perspectiva protestante. Esto incluye desde escuelas primarias hasta secundarias y preparatorias, lo que implicaría su presencia en miles de aulas en todo el estado, incluidas las del área de Houston.
Argumentos de los promotores
Quienes impulsaron la legislación, principalmente legisladores republicanos, han defendido que los diez mandamientos forman parte del fundamento histórico y legal de Estados Unidos. Durante los debates en el Capitolio de Texas, señalaron que su exhibición podría reforzar valores como el respeto, la honestidad y la responsabilidad en el entorno escolar.
También citaron la decisión de la Corte Suprema en Kennedy v. Bremerton Independent School District (2022), que según ellos abrió la puerta a la reinstalación de símbolos religiosos en instituciones públicas, al revertir precedentes judiciales restrictivos.
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Precedentes judiciales y fallos recientes
A pesar de esta interpretación, tribunales federales en Luisiana y Arkansas han fallado en contra de leyes similares en 2024, considerándolas inconstitucionales. Estas resoluciones podrían influir en el proceso que actualmente se desarrolla en Texas.
En particular, la jurisprudencia de la Corte Suprema desde hace más de cuatro décadas ha mantenido que la promoción de doctrinas religiosas en el aula puede generar presiones coercitivas sobre el alumnado, lo que representa una violación constitucional.
Impacto en Houston y el resto del estado
De aplicarse la ley el 1 de septiembre, las escuelas públicas de Houston ISD y otros distritos del área metropolitana tendrían que instalar carteles con los diez mandamientos en escuelas antes del inicio de clases. Esto requeriría ajustes logísticos y presupuestarios, además de posibles adaptaciones en las políticas internas para cumplir con la normativa.
En caso de que el tribunal conceda la suspensión solicitada por los demandantes, la implementación quedaría detenida hasta que se resuelva el fondo de la demanda, lo que podría prolongarse durante meses o incluso años.
Próximos pasos
La decisión judicial sobre la solicitud de orden judicial podría emitirse en las próximas semanas. Mientras tanto, tanto los distritos escolares como las familias permanecen a la espera de una resolución que definirá si la medida entra o no en vigor con el inicio del ciclo escolar.
La disputa legal en torno a los diez mandamientos en escuelas de Texas se enmarca en un debate más amplio a nivel nacional sobre el papel de la religión en espacios públicos y, especialmente, en el sistema educativo.
