Washington.- El presidente Donald Trump presionó a su par ucraniano, Volodímir Zelenski, para que ceda la zona de Donbás, que incluye las regiones de Donetsk y Luhansk, a Rusia durante la reunión que sostuvieron recientemente.
Trump recurrió a blasfemias durante la tensa reunión, revelaron fuentes cercanas consultadas por Reuters, Financial Times y The Washington Post.
Además de descartar la entrega de misiles Tomahawk a Ucrania, Trump le recalcó a Zelenski que estaba perdiendo la guerra y le advirtió: “Si (Vladímir) Putin lo quiere, te destruirá”.
«Esperemos que no los necesite (Ucrania). Ojalá podamos terminar la guerra sin pensar en los Tomahawks. Creo que estamos bastante cerca de lograrlo”, manifestó Donald Trump a la prensa antes de reunirse con Zelenski en la Casa Blanca.
Zelenski presentó mapas a Trump en la Casa Blanca con los frentes de batalla en Ucrania, los cuales el republicano arrojó a un lado. “Esta línea roja… ni siquiera sé dónde está”, dijo Trump.
El mandatario ucraniano aseguró en una entrevista en la cadena ABC, que “no estamos perdiendo la guerra” y “tenemos que quedarnos donde estamos, no darle más a Putin”. Además, dijo estar dispuesto a asistir a la reunión que sostendrá el ruso con Trump en Hungría.
Las conversaciones diplomáticas para poner fin a la invasión rusa se han estancado desde la cumbre de Trump y Putin en Alaska.
El Kremlin indicó que se necesitan resolver «muchas preguntas» antes de que Putin y Trump puedan reunirse, incluyendo quién estaría en cada equipo negociador.
Pero desestimó las sugerencias de que Putin tendría dificultades para volar sobre el espacio aéreo europeo.
Hungría dijo que garantizaría que Putin pueda entrar y «mantener conversaciones exitosas» con Estados Unidos a pesar de una orden de arresto de la Corte Penal Internacional (CPI) en su contra por presuntos crímenes de guerra.
La posición de Trump sobre la guerra en Ucrania ha cambiado drásticamente en los últimos meses.
Al comienzo de su mandato, Trump y Putin se acercaron mientras el presidente estadounidense calificaba a Zelenski de «dictador sin elecciones».
Las tensiones llegaron a un punto crítico en febrero, cuando Trump acusó a su homólogo ucraniano de «no tener las cartas» en una acalorada reunión televisada en la Oficina Oval.
Las relaciones entre ambos se han estrechado desde entonces, ya que Trump ha expresado una creciente frustración con el mandatario ruso.
Pero Trump ha mantenido un canal de diálogo abierto y dice que «se llevan bien».
El líder estadounidense ha cambiado repetidamente su postura sobre las sanciones y otras medidas contra Moscú tras las conversaciones con el presidente ruso.
Putin ordenó una invasión a gran escala de Ucrania, describiéndola como una «operación militar especial» para desmilitarizar el país y prevenir la expansión de la OTAN.
Kiev y sus aliados europeos sostienen que la guerra es una apropiación ilegal de tierras que ha resultado en decenas de miles de bajas civiles y militares y una destrucción generalizada.
Rusia ahora ocupa alrededor de una quinta parte del territorio ucraniano, en gran medida devastado por los combates.