Se espera una visita de Trump a Texas mientras equipos de rescate luchan por salvar vidas. Houston también envía ayuda clave desde el fin de semana.
El presidente Donald Trump planea realizar su primera visita oficial a Texas desde su regreso a la Casa Blanca, luego de las devastadoras inundaciones que han afectado al área de Hill Country. Originalmente, el mandatario expresó su intención de viajar al estado el pasado domingo, pero decidió posponer su llegada para no interferir con las labores de rescate en curso.
«Hubiera ido hoy, pero solo estaríamos estorbando», comentó Trump antes de abordar el Air Force One el fin de semana.
Según confirmó la Casa Blanca este lunes, la visita de Trump a Texas está prevista para este viernes 11 de julio, siempre y cuando las condiciones lo permitan.
Un panorama crítico en la zona afectada
Las lluvias torrenciales provocaron desbordamientos en varios ríos del centro del estado, incluyendo el Guadalupe River. La zona de Center Point y Kerr County han sido particularmente golpeadas, con pérdida de vidas, estructuras dañadas y carreteras cerradas.
Un indicador del nivel de desastre es la imagen viral de un medidor de inundación completamente derribado en un puente sobre el Guadalupe River, símbolo de la magnitud del agua acumulada en cuestión de horas.
Las autoridades locales y estatales han insistido en que las personas eviten visitar la región si no forman parte de los equipos de emergencia. Nim Kidd, director de la División de Manejo de Emergencias de Texas, hizo un llamado claro: “Si no eres parte del equipo de rescate o no vives aquí, mantente alejado del área”.
Houston colabora con los esfuerzos de rescate
Desde Houston, el alcalde John Whitmire ha movilizado recursos adicionales para apoyar a las comunidades afectadas. Equipos de respuesta rápida, incluyendo bomberos y personal médico, han sido enviados desde la ciudad para reforzar los trabajos de rescate en Hill Country.
Whitmire también reiteró la necesidad de mantener las carreteras despejadas y de seguir las indicaciones de las autoridades, tanto para preservar la seguridad de los ciudadanos como para acelerar la recuperación.
Críticas y defensa desde la Casa Blanca
En medio de la emergencia, surgieron cuestionamientos sobre el funcionamiento del Servicio Meteorológico Nacional (NWS, por sus siglas en inglés). El senador Chuck Schumer solicitó una investigación para determinar si la falta de personal en la oficina de San Antonio contribuyó a posibles fallas en la predicción del evento climático.
Ante estos señalamientos, la secretaria de prensa Karoline Leavitt defendió la labor del NWS y aseguró que las advertencias se emitieron de manera oportuna. «Echarle la culpa al presidente Trump por estas inundaciones no tiene fundamento», afirmó durante su conferencia de prensa diaria. «El Servicio Meteorológico Nacional hizo su trabajo a pesar de la lluvia sin precedentes».
Contexto político de la visita de Trump a Texas
Durante su primer mandato, Trump visitó Texas en 18 ocasiones, incluyendo cuatro viajes relacionados con tragedias naturales. En 2017, su primer viaje como presidente fue a Corpus Christi tras el paso del huracán Harvey. Días después, visitó Houston para ver de cerca los estragos del ciclón en la ciudad.
Esta nueva visita de Trump a Texas se enmarca en un escenario similar, con el presidente buscando proyectar liderazgo en medio de una catástrofe. A diferencia de 2017, esta vez Trump enfrenta una realidad política diferente y una opinión pública polarizada.
Advertencias y próximas acciones
Los funcionarios estatales mantienen activo un sistema de monitoreo ante la posibilidad de más lluvias. Las autoridades de Houston, así como otras ciudades cercanas a Hill Country, permanecen en alerta y coordinan con la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) para asegurar recursos suficientes.
Se espera que, durante su visita del viernes, Trump recorra algunas de las áreas más afectadas y se reúna con líderes locales y personal de emergencias.
¿Qué significa para Houston la visita de Trump a Texas?
Aunque los daños más graves se han concentrado en el centro del estado, Houston juega un papel clave en la respuesta estatal. Las unidades de rescate desplegadas desde la ciudad son un ejemplo de coordinación regional que ha sido crucial para atender esta emergencia.
Además, el antecedente de la respuesta a Harvey hace que los residentes de Houston sigan con atención el desarrollo de esta situación y la presencia del presidente en territorio texano.