Colaboración Especial de Lorena Brown
Houston.- La música es una transmisora universal de emociones. No importa la nacionalidad, la cultura, el idioma, la música siempre nos permitirá sentir y transportarnos. Y los asistentes al primer Festival Uruguayo en Houston, realizado en Vértigo Club, experimentaron esto el pasado domingo. El show fue organizado por Ricardo y Paula D’Oliveira, de la compañía Hill2Hill Records and Events, con el apoyo del Ministerio de Educación y Cultura de Uruguay, la Cámara de Empresarios Latinos de Houston, y Gold Quest Group, entre otros.
El espectáculo contó con público estadounidense y latinoamericano, pero fue especialmente emotivo para los uruguayos que residen en Houston, quienes disfrutaron de muchos clásicos de su país. La presidenta de la Cámara de Empresarios Latinos de Houston, Adriana González, y Juan Pablo Cabral, estuvieron a cargo de la apertura y presentación de los artistas.
Una buena muestra de la música uruguaya, con folclore y canciones populares de la mano de Oscar Cardozo, los internacionalmente conocidos clásicos del tango en la voz de Ricardo Olivera, los boleros en español e inglés de Luis Alonso Hernández III con Raúl Bisio en el teclado, y la presentación de Terapia de Murga. Además, los bailarines Susana Collins y Neeraj demostraron su calidad en el “dos por cuatro”.
Ricardo Olivera habló de la importancia de que la gente que emigra no pierda sus raíces. Fotos Cortesía
Por su parte, el cantante uruguayo Ricardo Olivera, con más de 40 años de trayectoria en la música, dijo antes de la presentación que “el tango es un género a veces un poco olvidado o puesto en el cajón, y periódicamente lo hacen resurgir, como cuando se le declaró Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad y se le dio un poco más de atención”.
Olivera ha grabado cuatro discos y ha realizado diversas giras por Latinoamérica y Estados Unidos. De hecho, este espectáculo es parte de su presente gira por ciudades estadounidenses, tales como Las Vegas, Miami, New Jersey y New York, para luego recorrer varios escenarios de Europa. Además, en 2024 realizará una gira por Estados Unidos con Paysandú es Tango, programa cultura uruguayo que procura difundir este estilo musical típico del Río de la Plata.
El principal objetivo de Olivera es tocar los corazones más jóvenes. “El tango me trasciende, está más allá de mí, pero mi objetivo es, dentro de lo que yo pueda dejar, es la transmisión hacia las nuevas generaciones. Obviamente, que hay un tiempo para el tango, un momento en la vida para el tango. Habitualmente, los jóvenes no lo consumen de forma natural, pero llegado una etapa en la vida, las personas comienzan a prestarle atención. Mi objetivo es que las nuevas generaciones le den el valor y la trascendencia que realmente tiene el género”, indicó.
Vivir de la música es posible
Oscar Cardozo que reside en Houston desde hace 23 años, y se siente orgulloso de que ha podido vivir de la música. “Desde 2009 hasta 2022 viví exclusivamente de la música, no tuve otro trabajo”, dijo.
Aunque posee canciones propias, no ha sentido el impulso de grabarlas, aunque sí las ha registrado. “La gente siempre me dice que tengo que grabar mis propias canciones”, añadió. El talento de Cardozo le dio la oportunidad de abrir shows en Estados Unidos de varios reconocidos artistas, como Oscar D’León en el 2009 y Tito Rojas en 2015.
El carnaval no faltó
El carnaval uruguayo no faltó a la cita gracias a Terapia de Murga, un coro que entona de forma jocosa canciones referentes a situaciones sociales o políticas de la actualidad. Este coro está integrado por Julio Pérez, Damián Luzardo, Alejandro González, Facundo Marega, Diego Scornajenghi, Adrián Techera, Federico Pittaluga, Diego Techera, Facundo Giménez, Maximiliano Pérez, y Raúl Giménez, reconocidas figuras del carnaval uruguayo.
Terapia de Murga se está presentando en varias ciudades de Estados Unidos, como Los Ángeles, New Jersey y New York, y de España. El show, de 90 minutos, está formado por clásicos del carnaval, así como tangos y canciones populares interpretadas en tiempo de murga, y apunta al público local y a la colonia uruguaya en las diferentes ciudades.
