Los peligros de que los menores de edad tengan accesos a redes sociales y otras aplicaciones son constantes, es muy fácil que se pueda perder la supervisión de los padres de un momento a otro. Entonces ocurren sucesos que pueden marcar la vida de un menor y toda su familia.
Hace unos días, autoridades informaron que un hombre de Houston pasará más de dos décadas en la cárcel por traficar con una niña de secundaria y haberla marcado con sus iniciales.
Según la Oficina del Fiscal Federal, el acusado, Juwan James Davis, conoció a la niña cuando esta tenía 13 años en la aplicación de Snapchat y le dijo que quería que ella tuviera relaciones sexuales a cambio de dinero.
Luego, Davis publicó anuncios de ella usando lencería en la página Backpage para publicitarla para el sexo comercial.
Según documentos de la corte, la víctima dijo a los investigadores que Davis la llevaría a hoteles para que pudiera tener relaciones sexuales con los clientes y que cuando terminara, él debería recogerla y tomar el dinero. La víctima también dijo a los investigadores que Davis le dio drogas y le hizo hacerse un tatuaje con sus iniciales.
De acuerdo a World’s Children, una organización que se dedica a trabajar en pro de los niños alrededor del mundo, un 66% de las víctimas de trata infantil son niñas, que se ven obligadas a dejar la escuela y viven en un ciclo de pobreza.
En el caso de la menor aquí en Houston, las autoridades obtuvieron una orden de registro para el teléfono de Davis y encontraron comunicaciones entre él y la víctima en las que hablaban de que ella se dedicaba a la prostitución y las cantidades a cobrar por sus actos.
“El teléfono contenía varias fotografías de la víctima, algunas de las cuales fueron utilizadas en los anuncios de Backpage”, dijo la Oficina del Fiscal Federal.
“También había fotografías de la estudiante de séptimo grado con un tatuaje de las iniciales de Davis en los glúteos”.
Davis se declaró culpable de los crímenes el 2 de marzo y fue sentenciado a 25 años en una prisión federal. En su audiencia de sentencia, el tribunal escuchó cómo intentó manipular y controlar a la víctima contactándola desde la cárcel en un intento de lograr que retirara los cargos.
Después de que Davis termine su sentencia, cumplirá 15 años en libertad supervisada y también se le ordenará registrarse como delincuente sexual.
Lamentablemente, la víctima murió a principios de este año a la edad de 18 años.
“Hace cinco años, cuando sólo tenía 13 años, debería haber participado en lo que hacen los estudiantes normales de secundaria: partidos de fútbol, obras escolares y reuniones de motivación”, dijo el fiscal federal Alamdar S. Hamdani. “En lugar de eso, Juwan James Davis vendió su cuerpo”.
