El presidente Joe Biden llegó hasta el Capitolio la noche del martes 7 de febrero para dar su mensaje anual sobre el Estado de la Unión. Especialistas han descrito este mensaje como combativo y conciliador, justo cuando se cumple la mitad de su término como presidente.
Una de las prioridades de Biden fue hacer un llamado a la unidad entre ambos lados, resaltó los logros bipartidistas que se han hecho durante su presidencia. Al mismo tiempo, instó a que se siga trabajando en unidad a pesar de que el Congreso ahora está controlado por el partido Republicano.
“Se nos dice que los demócratas y los republicanos no pueden trabajar juntos. Pero juntos defendimos una Europa más segura. Se aprobó una ley de infraestructura. Se lanzó una nueva era de fabricación. Obtuve ayuda para veteranos expuestos a sustancias tóxicas. Lo hicimos en el último Congreso. No hay razón por la que no podamos hacerlo de nuevo”, expresó el presidente.
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No faltaron los abucheos y gritos contra su mensaje, especialmente cuando mencionó que los legisladores republicanos tienen planes de “deshacerse del Medicaid y Seguro Social”.
La representante republicana del estado de Georgia, Marjorie Taylor Geene, se aseguró de ser escuchada mientras le gritaba “mentiroso” al mandatario.
En cuanto al tema de inmigración, Biden brevemente insistió en un camino a la ciudadanía para los “Dreamers”, los jóvenes beneficiarios de DACA y otros con permisos provisionales.
Sobre el tema de China, muchos dicen que esto pasó a un segundo plano en el discurso del presidente.
«Como dejamos claro la semana pasada, si China amenaza nuestra soberanía, actuaremos para proteger a nuestro país».
Para otros quedó claro que el líder de este país seguirá trabajando en una agenda donde buscará la unidad entre ambos partidos.