El Departamento de Bomberos de Houston despidió a 12 cadetes por conducta racista y ofensiva, tras una investigación interna y del Inspector General de la ciudad.
El Departamento de Bomberos de Houston confirmó que 12 cadetes fueron despedidos debido a lo que describieron como «comportamiento racista y de odio». La decisión se anunció días antes de la ceremonia de graduación de dos clases de la academia.
Según el jefe Thomas Muñoz, los cadetes no habían sido juramentados oficialmente y su conducta violó el reglamento interno del departamento. La investigación se inició luego de que otros miembros reportaran el comportamiento ofensivo a través de los canales internos del Departamento de Bomberos de Houston.
Investigaciones internas y cero tolerancia
El caso fue revisado tanto por la División de Normas Profesionales como por la Oficina del Inspector General de la ciudad. Los informes concluyeron que los cadetes compartieron contenido ofensivo y discriminatorio, incluso después de haber recibido advertencias.
“El racismo y el odio no tienen cabida en esta administración ni en el Departamento de Bomberos Houston”, dijo el jefe Muñoz en el comunicado. Subrayó que la institución mantiene un compromiso firme con el respeto, la integridad y el servicio a la comunidad.
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Una academia que forma líderes públicos
La academia del Departamento de Bomberos de Houston es conocida por su exigencia en la formación de bomberos y el desarrollo de valores como la ética, el trabajo en equipo y la responsabilidad cívica. El incidente ha generado preocupación sobre cómo se refuerzan estos principios durante el entrenamiento.
El reglamento de la academia prohíbe expresamente cualquier conducta que promueva odio o discriminación. Al violar estas normas, los 12 cadetes perdieron la posibilidad de formar parte de uno de los cuerpos de emergencia más importantes del país.
Reacción en la comunidad
La noticia del despido ha generado diversas reacciones en Houston. Algunos líderes comunitarios respaldaron la decisión del Departamento de Bomberos de Houston, señalando que es esencial garantizar espacios seguros y respetuosos, especialmente en agencias públicas.
Aunque no se han revelado los detalles específicos de los mensajes ofensivos compartidos por los cadetes, el hecho de que ignoraran las advertencias previas dejó en claro una falta de compromiso con los estándares del cuerpo.
Compromiso con el servicio y la inclusión
El Departamento de Bomberos de Houston ha reiterado que continuará promoviendo una cultura de respeto, inclusión y servicio. A pesar del incidente, la formación de nuevos aspirantes continúa, con una mayor atención a la ética profesional desde el inicio del proceso de entrenamiento.
Este caso podría servir como referencia para otros departamentos en Texas y a nivel nacional, marcando un precedente sobre la importancia de mantener la integridad institucional desde las etapas formativas.
