Era el 9 de diciembre del año 2012 y todos incrédulos vimos en la pantalla lo que estaba pasando en las noticias.
Se hablaba del accidente aéreo del avión donde viajaba la cantante Jenni Rivera.
No se sabía nada, solo que el avión había desaparecido del radar a minutos de haber despegado del aeropuerto en Monterrey.
Conforme pasaron las horas fueron llegando imágenes del accidente en la sierra del estado de Nuevo León y poco a poco comenzamos a prepararnos para el desenlace que ya todos conocemos.
A pesar de que todo indicaba que la ‘Diva de la banda’ y todo su equipo habían perecido en ese fatal accidente, todos teníamos la esperanza de estar equivocados.
Pero para esa tarde el gobierno oficialmente informó que efectivamente, Jenni había fallecido. Allí comenzó la leyenda de quien vive por medio de su legado musical y a una década de su muerte, la “Gran señora” continúa vigente.
Los que tuvimos la suerte de que nuestros caminos se cruzaran con el de Jenni, vimos como era ella con sus seguidores quienes al paso del tiempo la siguen recordando.
“El pueblo es muy importante para mí. De ahí salí, de ahí soy. Hablo como mi gente, soy igual que ellos, me expreso como ellos. Imáginate, ellos son lo que me han puesto en el lugar que estoy, entonces tengo que tenerles muchísimo cariño”, me dijo Jenni en una ocasión durante una entrevista.
Su éxito era avasallador, luego de varios años luchando por tener un carrera, al fin lo había logrado y cada cosa que hacía era sinónimo de éxito.
Sus discos, su programas de telerrealidad, participaciones en programas de diferentes televisoras.
Todo eso era muy importante para ella, pero había algo que era mucho más importante y eso lo dejaba siempre muy claro.
“El primer lugar en mi vida lo tiene mi familia, es lo más importante es lo primordial. Es por ellos que he logrado muchas cosas. Mi familia inmediata son mis hijos quiero sacarlos adelante y llevar el nombre de la familia Rivera muy en alto”, compartió conmigo luego de su presentación en la entonces Plaza Rodeo San Miguel aquí en Houston.
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Hoy a diez años de su muerte se han lanzado varios discos de sus últimas presentaciones en vivo y varios sencillos entre los que se encuentran “Aparentemente bien”, “Engañemos”, “Motivos” y recientemente hace menos de un mes se estrenó “Misión cumplida”.
No podemos dejar de mencionar el libro “Inquebrantable” que se lanzó en el 2013, mismo que ella había comenzado a escribir tiempo antes de su muerte.
A pesar de la controversia que ha surgido entre sus familiares, Jenni sigue siendo un ejemplo para muchas mujeres que luchan cada día para sacar a sus hijos adelante, es un ejemplo para otros artistas especialmente mujeres que quieren hacer una carrera en el mundo de la música, incluyendo a su hija Chiquis que ahora goza de gran fama en su carrera artística.
Es por eso que Jenni es y será por siempre una figura inmortal de la música.