Houston.- En esta nota nos vamos a remontar a la década de los años 80, cuando por medio de la televisión como máximo medio de información llegaba el glamour de los concursos de belleza en todos los países. Uno de ellos era México, lugar donde lo que se veía por televisión se convertía en el sueño de muchas, ser una reina de belleza.
De esto se trata la serie “Señorita 89” que ya estrenó por Pantaya, una historia de suspenso, donde el tema central es el certamen de belleza de México. Pero no todo es como se ve en la pantalla y detrás del sueño de las 32 participantes hay mucha oscuridad.
La reconocida actriz Ilse Salas, interpreta a “Concepción”, la encargada de coordinar este concurso de belleza y responsable de que todas las participantes luzcan tan bellas para merecer la corona. “Concepción” junto a un equipo de expertos maquilladores, entrenadores e incluso cirujanos, da la bienvenida a las jóvenes a su finca, “La Encantada”. Allí, vivirán un duro entrenamiento de tres meses hasta llegar al certamen de Miss México.
“Es una mujer muy masculina, pero contradictoria. La van a ver en una apariencia muy feminizada, pero en esencia ejerciendo como el poder patriarcal, el mismo del que ella se queja. Yo digo que es un mundo de contradicciones”, dijo Ilse Salas sobre su personaje durante la entrevista con La Prensa de Houston.
Toda esta ficción también tiene su realidad y es que a pesar de que “Señorita 89” es una historia cruda, para Salas, la parte importante es que la audiencia se divierta y se intrigue “por los temas que tocamos”. Además, la histrión expresa su sentir ante este tipo de certámenes, mismos que compara con la historia que se cuenta en la serie.
“Así como desprecio los concursos de belleza y lo he hecho durante muchos años, me cambió la percepción de las que participan en ellos. Ciertamente son mujeres, cada una con una historia, muchas de ellas no tienen otra manera de escapar o de construir una mejor realidad, porque están cerradas todas las puertas”, expresó.
Al mismo tiempo comparte que “la empatía como mujer hacia mi género creció muchísimo y así como podemos juzgar los estereotipos de belleza, creo que podemos tener empatía con quienes quieren incluso pertenecer a ellos”.
Salas a su vez afirma que afortunadamente esta serie solo es ficción, pero sí comparte cómo se ha diversificado la opinión de la gente ante los certámenes.
“¿Por qué ya no tienen el mismo auge los certámenes de belleza que tuvieron en los 80? ¿Qué está pasando políticamente hablando entre nosotras? Como para que ya no nos importe tanto pertenecer a un cierto molde que alguien más nos exigió, que en su mayoría eran hombres con dinero. Esos eran los jueces en los 80, los dueños de empresas juzgando como debería ser la mujer ideal”, aseveró.
“Suena absurdo, pero pensar que llevamos cincuenta años comprándolo sin cuestionarlo, la serie nos va a revolucionar un poco internamente”, finalizó.