En caso de aprobarse la propuesta de ley HB 20, arreciaría la postura antiinmigrante propuesta por el gobernador Greg Abbott, ya que se arreciarían las medidas que vienen impulsadas desde la aprobación de la Ley Estrella Solitaria, así como la propuesta HB7, que establece la creación de un sistema judicial paralelo para juzgar a los migrantes y contrabandistas detenidos por las patrullas estatales.
Mientras que los activistas de derechos humanos han establecido un riesgo creciente. Por ejemplo, Bob Libal, consultor en EE.UU. de la organización Human Rights Watch, solicitó que el comité de Asuntos Estatales de la Cámara de Representantes de Texas se oponga tanto a la propuesta HB 20 como a la HB7.
“En conjunto, las (dos propuestas de) leyes representan un esfuerzo extremo y peligroso para expandir el programa de vigilancia fronteriza de Texas, incluida la creación de una unidad de protección fronteriza para vigilantes patrocinada por el estado y la codificación y la expansión de un sistema policial, judicial y penitenciario fronterizo que hasta la fecha ha resultado en lesiones, muertes, discriminación racial, condiciones de detención abusivas, y un efecto paralizante en las libertades de asociación y expresión”, aseveró.
Opositores a las propuestas de ley antiinmigrantes HB20 y HB7 ya han protestado.
Con la propuesta HB 20 también reclamará autoridad para que Texas niegue la entrada por motivos engañosos de salud pública similares a la política federal de EE.UU. llamada Título 42, que se invocó durante la pandemia de Covid-19.
El proyecto de ley crearía un cargo de delito grave de tercer grado de traspaso criminal con una multa mínima de 10 mil dólares; y financiaría aún más el muro fronterizo de Texas.
La organización Human Rights Watch ha documentado el impacto del programa de aplicación de la ley fronteriza de Texas de 4 mil 400 millones llamado Operación Estrella Solitaria (Lone Star).
Donde el programa, que no ha logrado alcanzar su objetivo declarado de “negar a los cárteles mexicanos y otros contrabandistas la capacidad de transportar drogas y personas a Texas”, ha provocado lesiones y muertes, ha violado sistemáticamente los derechos de los migrantes y ciudadanos estadounidenses, y ha suprimido las libertades de asociación y expresión.
Bob Libal instó al comité a oponerse a la HB20 y la HB7, porque en conjunto representan un esfuerzo peligroso y extremo para expandir el problemático y abusivo programa de vigilancia fronteriza de Texas y permitir que los vigilantes patrocinados por el estado participen en estos programas.
“Estos proyectos de ley proponen un sistema de ejecución criminal y vigilantes patrocinados por el estado que seguramente resultará en incidentes nuevos y generalizados de abuso de los derechos humanos en el estado de Texas”.
Sin embargo, la propuesta de ley HB20 del representante republicano Matt Schaefer se basa en los continuos actos de agresión de violentos cárteles criminales transnacionales están poniendo en peligro inminente las vidas de los texanos y los estadounidenses.
“¿Cuántas personas morirán por envenenamiento con fentanilo? ¿Cuántos terratenientes más sufrirán daños a la propiedad por parte de intrusos y contrabandistas?”, le indicó al mismo comité revisor.
