México.- En lo que se consideró como un operativo “quirúrgico” entre varias corporaciones, el pasado 05 de enero fue detenido Ovidio Guzmán López, hijo del exlíder del Cártel de Sinaloa Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera; en la víspera de la visita del presidente estadounidense Joe Biden.
Pese al bajo perfil que tenía, la detención de Ovidio, conocido como “El Ratón”, representa un gran triunfo del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, luego que el 17 de octubre de 2019 ya había sido detenido, pero los sicarios a su cargo realizaron varias maniobras para amenazar con ataques a las familias de militares y de la población en general, ante lo cual autoridades del gobierno determinaran liberarlo para evitar derramamiento de sangre de inocentes.
Ahora, fue en un rancho ubicado en las afueras de la ciudad de Culiacán donde fue detectado el hijo del “Chapo” (quien está recluido en EE.UU. enfrentando cargos por narcotráfico), y en unos minutos pudo ser detenido.
Ante la esperada respuesta violenta del cártel se preparó un escenario que dejó un saldo de 29 muertos, 10 de los cuales eran militares y 19 integrantes de la organización criminal, donde el gobierno resaltó que no murió ningún civil. No obstante, fueron cuantiosos los daños provocados en el rancho. Pero la respuesta del cártel sumó 19 bloqueos en vías de comunicación y una serie de enfrentamientos armados, donde incluso un avión militar y uno comercial recibieron impactos de arma de fuego.
En información oficial se dijo que se tenían contabilizados 19 fallecidos por parte del crimen organizado y se detuvieron a 21 personas del mismo grupo delictivo. Se aseguraron 4 fusiles Barret calibre 50, seis ametralladoras calibre 50, también 26 armas largas, 2 cortas, cargadores, cartuchos, equipo táctico diverso y 13 vehículos operativos. Se inutilizaron 40 camionetas de las cuales 26 eran blindadas.
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Lo anterior fue en una respuesta para tratar de liberar a “El Ratón”, lo cual fue inútil, debido a que fue llevado en un helicóptero del sitio de la detención y en un avión militar hasta la ciudad de México, donde horas más tarde sería ingresado a la cárcel de máxima seguridad conocida como “El Altiplano”, la misma donde “El Chapo” se fugó con ayuda de personal de la prisión en julio de 2015, previo a ser detenido nuevamente y extraditado a Estados Unidos donde fue enjuiciado.
El Departamento de Estado de EE.UU. ofrecía una recompensa de 5 millones de dólares por Ovidio, pero también para sus hermanos José Alfredo Guzmán Salazar, “Alfredillo”; Joaquín Guzmán López e Iván Archivaldo Guzmán Salazar “El Chapito”.
Esta es una de las fotos que salieron luego que Guzmán fuera arrestado.
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos, señala a Ovidio Guzmán y sus hermanos de tener un gran poder al interior del Cártel de Sinaloa, donde concentra operaciones relacionadas con la producción y tráfico de marihuana, cocaína, efedrina, metanfetamina y fentanilo.
La detención del hijo del “Chapo” se dio previo a Cumbre de Líderes de Norteamérica, donde asisten el primer ministro canadiense Justin Trudeau junto a Biden y López Obrador.
