La palabra ‘influencer’ se deriva de la palabra influir, es decir una persona que tiene el poder de impactar, ayudar a crear una opinión y hasta una acción de sus seguidores.
En la época en la que vivimos, muchos ahora se hacen llamar ‘influencers’, algunos de verdad quieren crear cambios en sus seguidores y se dedican a ciertas causas, pero hay otros que no toman en cuenta la responsabilidad que esto en realidad tiene para su audiencia.
Gústele a quien le guste, Kim Kardashian, es una ‘influencer’, ha creado su imperio en el ojo público. Con una serie de ‘reality’, haciendo en vivos a cada rato y siendo muy activa en todas sus redes.
Ella vende su imagen y sus productos a sus seguidores, de todas las edades. En ocasiones ha dedicado su fama a causas que en realidad tiene un propósito positivo en un gran número de gente, pero también ha sido el foco de muchas controversias, como su divorcio con el rapero Kanye West.
Su vida ha sido muy pública, siempre de una forma u otra llena de controversias, chismes y escándalos, pero es de cada uno.
Sin embargo, lo que sí me parece es que se pasó de irresponsable con lo que hizo hace poco en el nombre de la moda.
La Kardashian tuvo el capricho de meterse en el vestido icónico de la legendaria Marilyn Monroe, este fue usado en Nueva York en 1962 para cantar feliz cumpleaños al presidente John F. Kennedy.
El vestido ahora vive en una bóveda localizada en Orlando, Florida en ‘Ripley’s Believe it or not!’, museo que lo compró en una subasta en 2016 por $5.1 millones de dólares, pero en la actualidad está valuado en $10 millones de dólares.
La Kardashian, siempre ha sido admiradora de Monroe, y en más de una ocasión ha usado atuendos parecidos y que más icónico sería que usar el vestido más reconocido es de la rubia de Hollywood en una de las galas más distinguidas.
La respuesta de Kardashian fue que, si ese no era su vestido para la Met Gala, ninguno lo sería y decidió iniciar una dieta rigurosa para bajar de peso en menos de un mes.
“Me lo probé y no me quedó bien. Dije, dame tres semanas. Tuve que perder 16 libras”, admitió Kardashian, en la alfombra roja del Met Gala.
Este tipo de dietas pueden ser muy peligrosas, y si es una práctica que quizás se use mucho en los deportes o entre actores que deben bajar o subir de peso para un papel, se hace con más tiempo. Kardashian, solo lo hizo para una gala.
Fue una acción vacía, sin tomar en cuenta el mensaje que le da a las jóvenes que tan fielmente la siguen o hasta las mujeres o hombres que la siguen.
Es un mensaje peligroso en especial para aquellos que ya sufren de algún trastorno por su peso u apariencia. Muestra un lado vacío de la ‘influencer’ y da el mensaje erróneo de cómo se debe bajar de peso.
Si, estoy de acuerdo que cada uno puede hacer lo que quiera con su cuerpo, sin embargo, los ‘famosos’, tienen, quieran o no un peso en influenciar a sus seguidores.
Al final del show, pérdida de peso y todo lo demás no le pudo cerrar de forma completa en el área más voluptuosa de la Kardashian.
Además, los encargados del vestido por parte de ‘Ripley’s Belie- ve it or not!’ solo dejaron que Kardashian se pusiera el vestido por unos minutos para la alfombra roja.
¿Usted qué piensa? ¿Haría algo así por un vestido que solo va usar unos minutos?