Just cuando se cumple seis meses de la guerra entre Israel y Hamás, Estados Unidos considera “inevitable” un ataque de Irán contra el país u objetivos israelíes y está en alerta y preparándose de forma activa ante esa posibilidad, informaron miembros de la Administración de Joe Biden a la cadena CNN y otros medios locales.
Esa supuesta ofensiva tendría lugar en respuesta al ataque reciente contra el consulado iraní en Siria, en el que murieron siete guardias revolucionarios y del que Teherán responsabilizó a Washington como aliado principal de Tel Aviv.
Las fuentes de CNN apuntan que sus homólogos israelíes coinciden a la hora de pensar que ese ataque iraní es “inevitable” y sería “significativo”.
Un alto funcionario del Gobierno de Biden confirmó a EFE que tanto el presidente estadounidense como el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, habían hablado de dichas amenazas en una llamada telefónica y que sus equipos estaban en “contacto regular y continuo desde entonces”.
CNN apuntó que un bombardeo iraní sobre territorio de Israel sería uno de los peores escenarios que contempla el Ejecutivo estadounidense, ya que provocaría una rápida escalada de la tensión en Oriente Medio.
Irán ya aseguró que Israel iba a pa- gar por el ataque a su consulado, apuntando que el país sería castigado y que harían que se arrepienta “de este crimen y de otros similares, con la ayuda de Dios”, según aseguró el líder supremo de Irán, Ali Jameneí, en un comunicado.
Las tensiones en la zona aumentan, a lo que abona que el presidente Joe Bi- den una fuerte reprimenda pública hacia Israel desde el inicio de su guerra con Hamás, advirtiendo que la política estadounidense sobre Gaza estará determinada si Israel toma medidas para abordar la seguridad de los civiles palestinos y trabajadores humanitarios.
El presidente dijo al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que Israel debe tomar medidas inmediatas para reducir el daño y el sufrimiento de los civiles. Biden también dijo a Netanyahu que un alto el fuego inmediato en la región era esencial y pidió “que concluya un acuerdo sin demora” con Hamás para traer a los rehenes israelíes a casa, a casi seis meses de iniciado el conflicto.
Sin embargo, desde el comienzo de la guerra de Israel contra Hamás en octubre, Estados Unidos ha aprobado ventas de armas a su aliado por decenas de millones de dólares, en línea con la enorme ayuda militar que le ha proporcionado durante décadas.
En los últimos seis meses de guerra, Estados Unidos ha hecho públicas dos ventas a Israel por el llamado procedimiento de “emergencia”, un trámite que permite el envío directo, obviando un proceso en el Congreso que toma 30 días.
A principios de diciembre, el gobierno de Estados Unidos autorizó la venta de 13 mil 981 proyectiles de 120 mm por 106 millones de dólares. A finales de diciembre, también se autorizó otra venta “urgente” de unos 57 mil proyectiles de 155 mm y equipo conexo, por un total de 147.5 millones de dólares. Estas armas procedían de las existencias del ejército estadounidense, lo cual molesta a varios países.