«No nos llames por eso«, es un mensaje que la Red de Emergencia 9-1-1 del Condado de Harris envía al público. A través de esta campaña, las autoridades esperan reducir las llamadas accidentales o que no son de emergencia.
Las llamadas por cortes de energía o agua, perros perdidos, molestias por ruido o llaves olvidadas en vehículos se consideran no de emergencia, según la campaña. Esas llamadas retrasan la atención de aquellos que realmente necesitan ayuda.
Según un comunicado de prensa, las llamadas al 9-1-1 son para aquellos que necesitan asistencia policial, de bomberos o médica.