Ya regresó a su oficina el Fiscal General de Texas, Ken Paxton, luego de enfrentar un juicio político donde al final fue completamente absuelto por un el Senado de Texas en su mayoría compuesto por republicanos.
El político fue acusado de cargos de corrupción, soborno, abuso de poder, entre otros que sumaban 16 y durante dos semanas estuvo en el banquillo de los acusados escuchando los testimonios de varios testigos.
Al final, el sábado 16 de septiembre, Paxton fue totalmente absuelto de todo cargo e inmediatamente arremetió contra la administración del presidente Joe Biden.
“Abróchese el cinturón porque sus políticas anárquicas no quedarán sin respuesta. No permitiremos que usted destruya la constitución e infrinja los derechos de los tejanos. Tendrán que rendir cuentas”, dijo por medio de un comunicado.
Y es que Paxton se ha dedicado a demandar esta administración cada que tiene oportunidad, pero esta vez su regreso a la oficina que precede no es igual que antes. Mucho de su personal y gente cercana se han ido.
Algo que está asegurado es que ahora más que antes Paxton tratará de demostrar el poder que tiene la oficina de fiscal general, siendo Texas una de las líderes en el movimiento conservativo.