Perú.- Debido a la escalada de protestas tras la detención del presidente Castillo y ante un llamado a nuevas elecciones, el país se ha detenido, lo cual afecta la movilidad, los aeropuertos de las regiones del Cusco y Arequipa fueron cerrados durante horas, al igual que el servicio de trenes a la ciudadela inca Machu Picchu.
Los manifestantes, en su mayoría indígenas se oponen a que la designada presidenta interina Dina Boluarte continúe gobernando, han originado ya más de 45 muertos por disparos de la policía.
Decenas de turistas extranjeros y nacionales esperaban con sus maletas en el aeropuerto del Cusco su reapertura para viajar, según imágenes de televisión.
El servicio de ferrocarriles entre Cusco y la ciudadela inca Machu Picchu, joya del turismo de Perú, sigue suspendido hasta nuevo aviso, informó la compañía operadora.
En Lima, brigadas de bomberos continuaban trabajando en apagar el incendio de un antiguo edificio semideshabitado cerca a la plaza San Martín, donde se agrupaban centenares de manifestantes.
Las protestas del jueves 19 de enero de habitantes de zonas rurales de los Andes en Lima dejaron además 38 heridos entre policías y civiles, según informó el ministerio de Interior.
“Este gobierno no nos representa, es ilegítimo para el pueblo aimara por lo tanto hemos venido aquí para hacer sentir nuestra voz de protesta”, dijo a la agencia noticiosa AFP Ricardo Mamani de 47 años.
“Hemos viajado por 42 horas desde la región de Puno, estamos exigiendo de una buena vez que esta señora dé un paso al costado para que el pueblo esté en paz”, indicó el poblador aimara.
“Invitamos la intervención de los derechos humanos, no sentimos la presencia del derecho internacional. No hay nadie quien nos defienda”, manifestó indignado Mamaní que vestía de negro en señal de luto por las víctimas de la región Puno.
Las intensas protestas iniciaron desde que el 7 de diciembre fue destituido por el Congreso el presidente Pedro Castillo. El mandatario fue detenido por querer disolver el Parlamento, gobernar por decreto y convocar a una Asamblea Constituyente, justo el día en que la mayoría del Congreso le iniciaría un juicio con vacancia al ser acusado de diversos actos de corrupción.
Mientras tanto, se prevé que las manifestaciones continúen.
