Ante la oleada de protestas que ocurren en este país, la presidenta interina Dina Boluarte le pidió nuevamente al Congreso a que apruebe adelantar las elecciones generales para celebrarse en diciembre de este año, con la finalidad de sortear la grave crisis que vive el país.
Las protestas que iniciaron en diciembre pasado, tras la detención del entonces presidente Pedro Castillo, quien intentó disolver el Congreso, ya han cobrado la vida de cerca de 50 civiles a manos de la policía.
“Pusimos a consideración de los ministros este proyecto de ley para adelantar a diciembre de 2023 los comicios”, dijo Boluarte en un acto de gobierno en el aeropuerto militar de Lima.
“Desde el Ejecutivo habíamos planteado para que estas elecciones se adelanten a abril de 2024, proyecto que en el Congreso se votó una vez y se está esperando la segunda votación. Sin embargo, las protestas continúan, hay más bloqueos y violencia”, reconoció Boluarte.
El pedido de Boluarte de un nuevo adelanto de las elecciones se produce en momentos en que no dan tregua las marchas y bloqueos de carreteras que han generado problemas de escasez de combustible, alimentos e insumos médicos.
“Si (los partidos) Fuerza Popular y Alianza para el Progreso están pidiendo lo que ellos ya habían presentado (un adelanto de elecciones a 2023), que se retome en ese sentido esa propuesta que no tiene ningún condicionamiento y nos va a sacar del atolladero en el que estamos”, dijo Boluarte.
En medio de las protestas en Lima y regiones del sur andino, pobre e históricamente marginadas, el partido fujimorista Fuerza Popular planteó el jueves adelantar las elecciones generales en Perú de abril de 2024 para una fecha este año, una posición que se espera que el Congreso pueda debatir.
Por su parte, el presidente depuesto, Pedro Castillo, agradeció a la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) la “valentía y coraje” para denunciar “las violaciones sistemáticas de los derechos humanos!” tras las protestas contra el gobierno.
“Desde mi cautiverio arbitrario, sometido por la dictadura de Dina Boluarte, mediante un proceso judicial viciado de legalidad […] denuncio las violaciones contra los derechos humanos que están cometiendo en contra de mis hermanos […] Gracias a la Cumbre Social de la Celac por tener la valentía y el coraje en denunciar las violaciones sistemáticas de los derechos humanos que viene ejecutando el actual gobierno de facto”, dijo Castillo en un comunicado.
El exmandatario reiteró el agradecimiento y apoyo del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, así como de los mandatarios de Honduras, Xiomara Castro; y Colombia, Gustavo Petro, por la “firmeza en condenar la dictadura, mi detención arbitraria y exigir garantías individuales” de su proceso judicial.
A su vez, agradeció a los gobiernos de Argentina, Cuba, Bolivia, Chile y Venezuela en tomar las preocupaciones sobre la situación de las protestas en Perú contra el gobierno de Dina Boluarte.
También expresó el apoyo que tiene con el expresidente de Bolivia, Evo Morales, asegurando que “ha sido un líder político coherente en su defensa a la democracia y denuncia al gobierno fascista” de la actual mandataria.
A la par, el gobierno de Perú anunció la retirada de su embajador en Honduras, Jorge Raffo Carbajal, en respuesta a los comentarios realizados por la presidenta de ese país durante su intervención en la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).
“El Gobierno ha retirado definitivamente al embajador de Perú en Honduras en respuesta a la inaceptable injerencia en asuntos internos de la presidenta Xiomara Castro en su intervención en la CELAC desconociendo al gobierno constitucional de la presidenta, Dina Boluarte”, indicó el Ministerio de Exteriores peruano en un mensaje.